Tiempos del incendio es una novela que nos introduce en un momento histórico crucial del acontecer político y social de Venezuela. Retrata esa situación de inestabilidad y agitación que tuvo lugar a finales del siglo XX y que fue coronada por la gran revuelta del Caracazo o Sacudón de febrero de 1989. Esta novela ocupa un lugar importante en el contexto actual, por lo que no es posible considerarla simplemente una cápsula histórica: el Caracazo fue el germen de un sentimiento político, el mismo que hoy guía nuestro proceso revolucionario. Tiempos del incendio es más que buena lectura, es lectura necesaria, en particular para las nuevas generaciones que no presenciaron o que vivieron parcialmente un fenómeno de tal magnitud.
Este libro recrea la atmósfera de agitación e inestabilidad social de finales del siglo XX venezolano; un momento en que las protestas estudiantiles eran reprimidas brutalmente por los cuerpos de seguridad de la época. La novela reconstruye –de manera fabulada, pero con evidente base real– la historia de un grupo de estudiantes universitarios que se entregaron a la lucha por la igualdad social y política, siendo protagonistas de un periodo crucial para nuestra historia: el paso de una a otra Venezuela, la frontera temporal, política, económica y cultural marcada por el Caracazo o el Sacudón. Entre datos reales y ficcionales asistimos a los últimos meses de vida de un ardoroso combatiente: Gonzalo Jaurena, hijo de exiliados uruguayos, quienes huyeron de las dictaduras impuestas en el cono Sur por Estados Unidos mediante el Plan Cóndor. Ambas realidades, la del Uruguay de los años 70 y la de Venezuela del 89 se parangonan en dos generaciones de luchadores mártires, que dejan un legado de rebelión popular y reivindicaciones históricas.