Pereira representa a toda la poesía,

 todo lo que se habla de Gustavo Pereira

 habla del sentimiento y del

 sentido poético que posee

Luis Alberto Crespo

 

“El pueblo de Venezuela, en ejercicio de sus poderes creadores e invocando la protección de Dios, el ejemplo histórico de nuestro Libertador Simón Bolívar y el heroísmo y sacrificio de nuestros antepasados aborígenes y de los precursores y forjadores de una patria libre y soberana…”. Así comienza el Preámbulo de la Constitución de la República Bolivariana de Venezuela escrito por Gustavo Pereira.

El creador de Los seres invisibles nació el 7 de marzo de 1940 en la isla de Margarita, la perla del Caribe. El mar fue protagonista de su infancia y juventud –“Yo nací en una isla a la que el océano dio ternura. Océano este capaz de transmitir ternura y ser compañero de vigilia y derroteros”– hasta que viajó a Caracas para estudiar Derecho en la Universidad Central de Venezuela en los años sesenta. Ejerce como abogado y de juez provisional, antes de matricularse como docente universitario de Literatura Hispanoamericana y Nacional en la Universidad de Oriente, hasta su jubilación en 1993.

Sus primeros poemarios están cargados del tema existencial que explora en su juventud. Para Pereira “es importante saber que todos somos oficiantes de la poesía, pertenecemos al partido de los soñadores, aquellos que luchan por una sociedad justa y en armonía”.

Pereira crea el somari y lo define como “un pequeño instrumento apto para ser leído con la prontitud que esta complicada sociedad exige, pero que al mismo tiempo no fuese tan… vamos a decir, inofensivo”. Estos pequeños poemas parecidos al haiku están publicados en las obras: Libro de los somaris (1974) y Segundo libro de los somaris (1979). Al año siguiente aparece Sumario de somaris (1980), una muestra antológica de los mismos.

Tiene un doctorado en Estudios Literarios en La Sorbona de París con un estudio dedicado al Caribe precolombino, titulado Historias del Paraíso. Es el fundador del Departamento de Humanidades y Ciencias Sociales y del Centro de Investigaciones Sociohumanísticas de la Universidad de Oriente. Formó parte del grupo Símbolo (1958). Fue director y fundador de la Revista Trópico Uno de Puerto La Cruz.

Es autor de poemarios como: El rumor de la luz, Diario de mar, Oficio de partir, Sentimentario, Equinoccial. En prosa: El peor de los oficios, Historias del Paraíso, Simón Bolívar, escritos anticolonialistas, Los seres invisibles.

Ha recibido diversos reconocimientos, entre ellos, el Premio Joven de Poesía de las Universidades Nacionales (1965); el Premio Municipal de Poesía de Caracas (1988); el Premio Fundarte de Poesía (1993); el Premio de la XII Bienal Literaria José Antonio Ramos Sucre (1997) y el Premio Nacional de Literatura de Venezuela (2001). En 2008, la 5.a edición del Festival Mundial de Poesía estuvo dedicada a Gustavo Pereira.

Deja un comentario